¿Cómo se hacen las tortillas? (receta casera con harina de trigo)

Las tortillas son muy prácticas. Rellenas de lo que más nos gusta —carne, pollo, queso, verduras—, suelen ayudarnos a salir del apuro cuando el tiempo nos gana y necesitamos comer algo rápido. 

En México son de consumo diario, ahí donde no hay las de maíz se pueden encontrar las de harina de trigo, y se consumen cotidianamente como si fuera un pan plano (puedes leer más de estas tortillas en esta nota). Sin embargo, las tortillas que consumimos acá son productos industriales. Las  encontramos en los anaqueles de supermercados y bodegas, en un par de tamaños y en paquetes de 6 o 12 unidades. 

Pero, ¿te has puesto a pensar de qué están hechas estas tortillas? ¿Cómo es que pueden durar tanto sin refrigerar? ¿No preferirías hacer tus propias tortillas en casa, con productos naturales y sin tanto conservantes y saborizantes? Esta es la receta que estabas esperando.

¿Cómo hacerlas en casa?

Las tortillas de harina de trigo son más fáciles de hacer de lo que pensabas. Y lo mejor, es que las puedes congelar por mucho tiempo para usar cuando las necesites. En la refrigeradora pueden durar unos 4-5 días (herméticamente cerradas). Solo necesitas los cinco ingredientes básicos, un rodillo —o algo que cumpla su función— y una sartén o plancha.

Ingredientes:

• 500 gramos de harina de trigo sin preparar
• 1 pizca de sal
• 1 cucharadita de polvo de hornear
• 150 gramos de manteca (de cerdo o vegetal)
• 1 taza de agua caliente

Preparación:

• Cierne todos los ingredientes secos.
• Mezcla con la manteca o el aceite vegetal; debe quedar una masa arenosa.
• Agrega poco a poco el agua caliente, hasta formar una masa suave. Dale una forma de bola y deja reposar unos 15-30 minutos. 
• Sobre una superficie enharinada, forma pequeñas bolas y estíralas con el rodillo. Deben quedar unas tortillas delgadas. Si las quieres conservar, espolvoréalas con harina o maicena, para que no se peguen (puedes armar paquetes de 6 tortillas).
• Calienta una sartén o plancha con una pizca de aceite, bien extendido por la superficie, y cocina las tortillas. Es probable que estas se inflen en sus puntos más gruesos, pero es normal. 

Unos tips:

El secreto para estas tortillas es el manejo de la humedad. Si las tortillas quedan muy secas, se van a quebrar fácilmente al calentarlas. También hay que tener cuidado con el fuego, ya que uno muy bajo puede sobre cocinar y secar las tortillas, mientras que uno muy fuerte las puede tostar. Cuestión de gustos y de la experiencia que vayas ganando en su preparación. 

¿Qué hacer con ellas?

Esta es quizás su principal ventaja: que son una especia de pan, como el árabe o pita, que podemos rellenar de lo que más nos gusta. Enrollados o fajitas de carne y verduras, o con las sobras de algún guiso o salsa; o en forma de quesadillas. También las puedes trozar y tostar, para comerlas como un snack, con guacamole o huancaína, quesos o la salsa de tu preferencia. Las tortillas van bien con todo. 

¿Qué nutrientes aporta las tortillas? 

Una tortilla comercial suele pesar entre 50 y 70 gramos. Como está hecha principalmente de harina, grasa saturadas y sal, suele aportar entre 160 y 250 calorías y una buena cuota de sodio, por lo que hay que consumirlas con moderación. Por ello, funciona muy bien como una comida para salir del apuro o para picar de cuando en cuando.