Grasas saturadas: ¿Por qué deben consumirse con moderación?
Identifica los alimentos que contienen grasas saturadas y evita el surgimiento de enfermedades cardiovasculares.
Las grasas saturadas provienen principalmente de los alimentos de origen animal. Un ejemplo son las carnes procesadas y los lácteos. Productos que, nos guste o no, forman parte de la dieta diaria de un gran número de personas alrededor del mundo. Por ello, lo recomendable –para evitar el aumento de colesterol en la sangre– es moderar su consumo.
Al respecto, la Asociación Americana del Corazón (AHA por sus siglas en inglés) recomienda que este tipo de grasa no supere el 5% o 6% de nuestra dieta diaria. Esto es no más de 120 calorías diarias procedentes de grasas saturadas: el equivalente a 13 gramos al día. A la par que reducimos el consumo de este tipo de grasa, lo recomendable es aumentar el consumo de grasa buena.
¿Qué alimentos contienen grasas saturadas?
Esta grasa se puede reconocer porque se solidifica al estar a temperatura ambiente. Seguro has visto que pasa esto con la mantequilla, o con la grasa que proviene de chorizos y tocino. Por eso, es recomendable reducir el consumo de carnes rojas y cerdo, y reemplazarlas por carne de ave y pescado; así como menestras y otros vegetales, que tienen grasas buenas.
Las carnes de res y cerdo son ricas en grasas saturadas. Consúmelas con moderación.¿Dónde más la encontramos? En el pellejo del pollo y en los cortes de carne grasos. Sí, son las partes más ricas, pero no se trata de reducirlas por completo, sino de consumirlas de forma moderada. También las encontramos en las golosinas.
Una alimentación saludable
Lamentablemente, el estilo de vida que llevamos por lo general no ayuda. Quienes vivimos en ciudades —50% de la población mundial—, llevamos una vida cada vez más sedentaria, con una dieta dominada muchas veces por alimentos procesados y ultraprocesados, y en ambientes que generan estrés. Por ello, la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda consumir una dieta balanceada, rica en frutas y verduras —de muchos colores—, con carbohidratos procedentes de productos no refinados, baja en azúcar, sal y alcohol; realizar ejercicio de forma regular y eliminar por completo el tabaco.
El mensaje en nuestro país va por el mismo camino. La Ley de Alimentación Saludable busca fomentar el consumo de productos naturales, la preparación de platos sanos y llevar un estilo de vida saludable. También recomienda reducir al mínimo la comida chatarra, ya que esta es rica en grasas dañinas e insumos ultra procesados. Nuevamente: no tienes por qué martirizarte y eliminarla por completo de tu dieta —¿te imaginas una vida sin helado o sin una buena parrilla?—: si lo haces moderadamente tampoco va a tener efectos nocivos.
Por ello, es clave que tú, como consumidor, aprendas a leer la información nutricional de los productos que compras y consumes, y defiendas y exijas que se cumplan las normas que obligan al rotulado (octógonos) de productos altos en grasas saturadas, grasas trans, azúcar y sal. Es nuestro derecho y lo mejor que podemos hacer por la salud de nuestros hijos.
El uso de octógonos que alertan sobre presencia de ciertos productos es una muy buena política de salud pública.Y lee aquí cuáles son las grasas buenas y por qué debes evitar el consumo del tipo de grasa más dañino para nuestro organismo: las grasas trans.