Patita con maní (VIDEO)
La patita con maní es uno de los platos más representativos de nuestra cocina criolla. Esta receta, de probable origen esclavo, aprovecha perfectamente una parte inusual de la res: las patitas. Es rica en colágeno y se disfruta mejor caliente, con arroz blanco y sarsa criolla.
Este plato tiene una rica historia en Perú. Durante el Virreinato del Perú, muchos africanos llegaron al país a través del comercio de esclavos y comenzaron a cocinar alimentos utilizando las partes menospreciadas de los animales. Así nació este plato, que además de ser sabroso, contiene dos ingredientes muy importantes: la patita y el maní, que son beneficiosos para nuestra salud.
Las patitas son una fuente de proteínas magras, esenciales para el crecimiento y reparación de tejidos, y también contienen colágeno, que ayuda a mantener la salud de las articulaciones y la piel. Además, están llenas de minerales como hierro, zinc y fósforo, que son vitales para el funcionamiento adecuado del organismo.
Por otro lado, el maní es una excelente fuente de grasas saludables, como los ácidos grasos monoinsaturados y poliinsaturados, que ayudan a mantener niveles adecuados de colesterol y proteger el corazón. También es rico en fibra, lo que contribuye a la salud digestiva y ayuda a controlar los niveles de azúcar en la sangre.
Aprender a hacer patita con maní no lleva mucho tiempo. Es una receta bastante sencilla que utiliza ingredientes que generalmente se encuentran en los mercados. Además, es una de las recetas más económicas que puedes preparar. A continuación, se detallan los pasos para preparar este popular platillo.
INGREDIENTES
PREPARACIÓN
- Calentar un chorro de aceite en una olla. Agregar la cebolla junto con una pizca de sal. Sofreír hasta que la cebolla quede transparente y dorada. Añadir el ajo molido y continuar sofriendo. Si es necesario, echar un poco más de aceite.
- Incorporar, uno a uno, los ajíes molidos. Dejar que se frían y se incorporen a la cebolla y el ajo dorados. Dar el tiempo de cocción necesario. Si el aderezo se seca, se puede humectar poco a poco con cucharadas de caldo.
- Agregar la patita cocida y picada. Mezclar bien para que absorba todos los sabores del aderezo. Condimentar con sal, pimienta, comino y un poco de hierbabuena picada. Echar el caldo de res y añadir 20 gramos de maní tostado previamente molido o triturado. Integrar bien todo y dejar hervir.
- Mientras tanto, pelar las papas blancas y cortarlas en cubos. Añadir las papas cortadas a la olla y cocinar de 12 a 15 minutos, o hasta que estén suaves.
- Aparte, licuar 100 gramos de maní tostado con un poco de agua hasta obtener una crema de maní homogénea. Incorporar esta crema a la olla, dar un último hervor al guiso y rectificar la sazón.
- Servir la patita caliente y espolvorear hierbabuena al gusto. Acompañar con arroz blanco y sarsa criolla.
TIPS
- Puedes ajustar la cantidad de ajíes panca y amarillo a tu gusto y de acuerdo con su picor e intensidad.
- El caldo de res se puede reemplazar por agua. Si cocinas la patita desde cero, puedes usar el caldo de cocción de la patita.