6 cortes para preparar cerdo a la parrilla

El cerdo a la parrilla tiene un sabor inigualable; sin embargo, para poder sacarle el jugo a esta carne, primero debemos entender que no todos los cortes son iguales. Las costillas, por ejemplo, no se cocinan de la misma manera que un lomo. Por eso, identificar cada corte y su respectiva técnica de cocción, son aspectos decisivos para obtener el resultado deseado.

Eso sí, antes de encender la parrilla, hay que prestar atención a algunos consejos sobre el cerdo, en especial en lo que respecta a los términos de cocción. A diferencia de la carne de res, que se puede comer casi cruda, el cerdo requiere de una buena cocción (revisa esta nota al respecto) por un tema sanitario. Por otro lado, este tipo de carne debe comprarse en lugares que brinden seguridad y garantía al consumidor.

Por último, hay que considerar también algunos aspectos sobre la parrilla. En esta nota te damos varios consejos para que hagas una parrilla memorable. Y no olvides estos tips para encender el carbón si acaso no tienes mechero. Ahora sí, ¡a disfrutar el chanchito! 

1. Costillas

Es una sección amplia del cerdo pues incluye casi toda su caja torácica. Es el corte preferido porque combina sabor —parte hueso—, algo de grasa y textura —bien dorado, crocante—. Puedes prepararlas solo con sal, o con tu sazón favorita: BBQ, criolla o anticuchera. Solo cuida de no cocinarla demasiado porque se puede secar. La idea es servirla aun jugosa, aunque bien cocida. Evita llegar al punto en que la superficie luce muy quemada.

2. Lomo o bondiola

El lomo es un corte noble, magro y largo que hay que cuidar en el calor para que no se seque. Hay marcas que ya lo venden sazonado. Puedes pedir que el corte venga con piel para aprovechar su sabor y, tras la cocción, puedes separarla fácilmente. Es mejor acompañarlo con una salsa o una ensalada de hojas verdes. En ocasiones es usado para el chicharrón cuando se prefiere que este tenga poca grasa.

3. Solomillo

El solomillo es un lomo pequeño: una corte largo, suave y sin grasa, por lo que hay que cuidar que no se seque, como el lomo. Se puede marinar la noche anterior para darle sabor con una preparación simple a base de miel, sillao, sal, pimienta y comino (de hecho, esta combinación le viene bien a todos los cortes de cerdo).

4. Chuleta

La chuleta incluye el hueso de la costilla. Este corte no solo es fácil de preparar a la parrilla, sino también al horno o frito. Es especialmente rica la punta de chuleta, porque es más sabrosa y suave. Hay quienes recomiendan cocinar primero la chuleta unos minutos y luego solo dorarla en la parrilla, bañada con salsa BBQ o anticuchera. 

5. Panceta

La panceta es el corte que tradicionalmente se usa para el chicharrón. Como tiene grasa y hueso, requiere una cocción larga en la parrilla, pro bien controlada. Por eso es mejor dejarlo en salmuera unas horas, luego sancocharlo unos minutos, y llevarlo al fuego para terminarla y darle color. Acompaña con encurtidos o una ensalada de manzana. 

6. Paleta

La paleta son las patas delanteras del cerdo, y son ideales para hacer la carne mechada o pulled pork. Es un corte jugoso, sabroso y que requiere una cocción larga. Por eso es mejor dejarlo reposar en una salmuera, para darle sabor a toda la carne... O abrirla y hacer un enrollado.