Comer esta fruta todos los días podría cambiar tu salud: regula el azúcar y cuida el corazón
La pera es una fruta ligera y versátil, rica en fibra y nutrientes, ideal para mejorar el tránsito intestinal y regular los niveles de glucosa.


Bien se sabe que las frutas mejoran—en todos sus aspectos—la digestión del organismo además de otros beneficios adicionales para la salud. Dentro de todas, existen ciertas variedades con propiedades específicas como la manzana para aumentar la saciedad o el caso de la pera para regular los niveles de glucosa.
Por lo mismo, se ha comprobado que la pera—al consumirse con piel—es rica en fibra y baja en calorías ideal para todas aquellas personas que buscan cuidar la digestión, así como también para aquellos que siguen un estilo de vida saludable.
Propiedades curativas de la pera
Destacada por su alto contenido en pectina, vitaminas A, C y B9, así como el magnesio, fósforo, calcio y potasio; esta fruta aporta propiedades antioxidantes que favorecen el correcto funcionamiento del organismo. Y es que nadie puede negar que la pera es de esos alimentos que se pueden agregar fácilmente a la dieta diaria: ya sea cruda, cocida, en compotas o en recetas saludables.

En esa línea, dentro de sus principales cualidades se encuentran:
- Capacidad para regular el azúcar en la sangre: Gracias a su bajo índice glucémico, es recomendado para personas con prediabetes o diabetes.
- Previene el estreñimiento: Su fibra estimula el tránsito intestinal.
- Favorece la pérdida de peso: Aporta pocas calorías, además de actuar como diurético y eliminar el exceso de líquidos retenidos en el organismo.
Beneficios adicionales de la pera
Pero la pera también cuenta con otros beneficios. Gracias a su aporte de vitamina C y antioxidantes, la pera presenta un papel destacada en el fortalecimiento del sistema inmunitario, de manera que refuerza las defensas y reduce la inflamación. Del mismo modo, protege la salud cardiovascular al disminuir el colesterol "malo" y mejorar la presión arterial.

Por otro lado, también cuida los huesos y los dientes, previene el envejecimiento prematuro de la piel y se le atribuye una posible reducción del riesgo de ciertos tipos de cáncer. De esa manera, se consolida como una fruta completamente necesaria para consumir dentro de una dieta equilibrada.
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