¿Es dañina la yema del huevo?
La mala fama que ha recibido la yema ha jugado en contra del prestigio de este alimento primigenio. Pero, ¿es buena o mala?
Lo cierto es que no hay una respuesta definitiva y absoluta. Cada persona es un mundo, y la alimentación es un tema que hay que coger con pinzas. ¿Qué hay de las grasas y el colesterol? ¿ Cuál es la forma más saludable de preparar huevos? ¿Por qué se dice que son dañinos?
Mucho se ha dicho sobre los beneficios y riesgos de comer huevos, en particular de la yema. Sin embargo, no hay respuestas concluyentes. Por eso, es bueno aclarar algunos conceptos y ver cómo está el estado de la cuestión respecto de si los huevos son o no son saludables. ¿Qué dice la ciencia?
Hasta hace unos años, el colesterol tenía una pésima reputación. De hecho, aún arrastra esa carga. Se le ve como una sustancia que obstruye nuestra venas y es responsable de muchos males cardíacos. Basta saber que un huevo mediano tiene casi 180 mg de colesterol (60% del consumo diario recomendado), y se entiende por qué tenía mala fama.
Pero los estudios actuales han dado nuevas luces sobres colesterol y la yema de huevo. Hoy sabemos, por ejemplo, que hay colesterol bueno y malo, y que nuestro organismo lo necesita y lo produce (el hígado, para ser más precisos). No, los huevos no son malos por sí solos. El colesterol tampoco.
Durante décadas el huevo y en especial la yema han tenido muy mala fama por culpa del colesterol.El equilibrio
Hay estudios que demuestran que las personas no varían mucho en sus niveles de colesterol a lo largo de los años. Lo que pasa es que si consumimos más colesterol, el cuerpo lo produce menos. Sí, naturalmente, nuestro cuerpo tiende hacia el equilibrio (como sucede el pH de la sangre, por ejemplo, y el mito del agua alcalina). Y sí, es posible que un exceso de consumo de colesterol tampoco sea lo adecuado para ciertas personas, todo depende de su metabolismo, costumbres, estilos de vida, etc..
¿El alimento perfecto?
Es mayor el consenso respecto de los beneficios del huevo que de sus perjuicios. La parte blanca —clara— es la que contiene la proteína, mientras que la yema acumula vitaminas y minerales, así como grasas esenciales y aminoácidos. Vista en perspectiva, el huevo es un súper alimento, que concentra muchos beneficios para la salud, en especial en entornos de bajos recursos —no es un alimento costoso—. El huevo además da la sensación de estar lleno, lo que también es un punto a favor para quienes bajar o controlar su peso.
El huevo en sí no es malo; es malo cómo lo comemos. Evita las grasas.¿Cuántos huevos comer?
Todo depende, nuevamente (mira esta nota sobre cuántos huevos es recomendable comer). Hay instituciones especializadas que no le ponen límites al consumo de huevos, mientras otras aconsejan no consumir más de un huevo —o dos— al día. Recuerda, eso sí, más que el huevo en sí, lo que suele causar mayor perjuicio a nuestro cuerpo es la forma como los comemos: evita freírlo en aceite o mantequilla, y consúmelo mejor cocido. ¿Quieres evitar el colesterol? Evita las grasas saturadas, pero sobre todo, las grasas trans. Esas sí son dañinas.