Vacuna COVID-19: ¿qué puedo beber y comer tras recibirla?
Muchas interrogantes surgen respecto de las vacunas contra el Covid-19, pero, ¿es necesaria una dieta especial luego de aplicada?
Mucha información falsa se ha difundido con respecto a las vacunas contra el Covid-19 pero, felizmente, es relativamente fácil desbaratar los mitos consultando expertos serios o, simplemente, revisando fuentes oficiales y autorizadas. Eso es lo que hemos querido hacer aquí y por eso consultamos nuestras dudas con la doctora Camille Webb, médico infectóloga de la UPCH e investigadora del Instituto de Medicina Tropical Alexander von Humboldt.
Uno de los malentendidos generados en estas semanas es el de las "contraindicaciones" y las restricciones en la dieta que una persona debe seguir en los días previos o posteriores a la inoculación de la vacuna. ¿Es necesario seguir un patrón de alimentación especial? ¿Hay alimentos que provocan efectos adversos o neutralizan el poder de las vacunas que circulan? ¿Hay insumos proscritos? Para responder a estas preguntas, hablemos primero de los efectos secundarios.
Efectos secundarios
Según la OMS, como ocurre con cualquier otra vacuna, “las que inmunizan contra Covid-19 pueden causar efectos secundarios leves, por ejemplo, febrícula o dolor y enrojecimiento en el lugar de la inyección”. Otros efectos detectados suelen ser: fiebre, escalofríos, dolor de cabeza, cansancio y, a veces, diarrea. Todo depende de cada vacuna y de la persona. En todo caso, son efectos leves y desaparecen en poco tiempo.
Sin embargo, es posible —aunque infrecuente— que también se identifiquen efectos más graves, por ejemplo en personas que muestran reacciones alérgicas. Pero ante este riesgo se han desarrollado protocolos muy estrictos implementados en el mismo lugar de vacunación para impedir que esos posibles efectos secundarios se agraven. Y han mostrado ser muy eficaces cuando han sido requeridos.
La irritación de la piel es un efecto secundario leve y muy común.Pero, ¿y la comida y la bebida?
En concreto, no hay ninguna contraindicación respecto de la comida, es decir, luego de aplicada la vacuna, la persona vacunada puede seguir con su alimentación regular y no requiere ninguna dieta especial distinta a la habitual. Salvo, claro, que tenga una reacción alérgica producto de la vacuna; pero todo depende de cada persona y deberá ser observado y evaluado por un profesional de la salud.
Ahora bien, dado que existe la posibilidad de desarrollar los síntomas leves antes mencionados tal vez convenga no ingerir comida demasiado pesada (que por ejemplo nos pueda ocasionar una indigestión) o ingerir bebidas alcohólicas en exceso (que tienen sus propios efectos secundarios) pues sería mejor evitar sumar malestares... No suena muy bien combinar fiebre con resaca, ¿cierto? Así que tal vez un buen consejo sea comer sano y ligero, al menos el primer día. Pero nada más.
Fortalece tu sistema inmunológico
Ahora bien, en términos generales, se recomienda mantener siempre una alimentación saludable y equilibrada: alimentos ricos nutrientes y en antioxidantes, como verduras y frutas (de distintos colores); también es clave una buena hidratación (siempre agua), evitando las bebidas azucaradas o con exceso de calorías. Tampoco está demás consumir complementos alimenticios, como vitaminas y minerales, con especial énfasis en aquellos con propiedades antivirales y antioxidantes (mira estas notas sobre la vitamina C y la vitamina D). Pero ojo: no estamos diciendo que sean requisito para la vacunación, solo que deben formar parte de una alimentación saludable cotidiana para mantener fuerte a nuestro sistema inmunológico.
La ciencia recomienda una dieta saludable que active el sistema inmunológico.Y recuerda, la OMS, que es el organismo internacional que supervisa y norma todo el proceso de vacunación, señala que, a pesar del corto tiempo de desarrollo de estas vacunas —todo un logro científico—, estas han alcanzado los más altos estándares de calidad, con base en ciencia y tecnología, y son inocuas. Además, para mayor seguridad, los organismos competentes en cada país siguen observando de cerca su aplicación para conocer mejor sus efectos y resguardar el bienestar de la población.
Las pruebas efectuadas garantizan los más altos estándares de calidad en las vacunas.Así que ya sabes: si llevas una dieta saludable y variada, puedes seguir con tu vida normal. Y eso sí, estate atento a los efectos de la vacuna y consulta a un especialista ante cualquier efecto adverso.
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