Arroz blanco que no engorda: cómo prepararlo con menos calorías en casa
Un truco de cocina, respaldado por la ciencia, promete reducir drásticamente las calorías del arroz blanco sin sacrificar su sabor ni su textura. Lo mejor es que puedes hacerlo en casa con un ingrediente que quizá ya tienes.


El arroz blanco, con unas 130 calorías por cada 100 g cocidos, es un alimento que acompaña cada comida en Latinoamérica. Con simples ajustes en la cocción y la preparación, es posible disfrutarlo con menos calorías, sin perder sabor ni tradición.
Reducir hasta la mitad las calorías del arroz blanco es posible con un sencillo método de cocción que incluye aceite de coco. Así lo demostraron investigadores de la Universidad de Sri Jayewardenepura, en Sri Lanka, quienes hallaron que esta técnica convierte parte del almidón en resistente, lo que el cuerpo no absorbe por completo.

Truco para cocinar arroz con menos calorías
Este proceso puede reducir hasta en un 50% las calorías digeribles. Antes de servirlo, se puede recalentar sin perder el efecto. Solo tienes que seguir estos sencillos pasos:
- Añadir una cucharadita de aceite de coco al agua de cocción
- Prepara el arroz de forma habitual
- Déjalo enfriar y refrigéralo durante 12 horas antes de comerlo.

Controla la porción y combina con vegetales
Más allá del método, la cantidad es clave. Una porción estándar para acompañar un plato debe ser de media taza cocida (aprox. 65-70 g), lo que evita un exceso de carbohidratos y calorías.
Otra estrategia efectiva es mezclar el arroz con verduras como zanahoria, calabacita, pimiento o brócoli. Esto aporta fibra, vitaminas y minerales, además de dar saciedad con menos arroz.
Lava el arroz antes de cocinarlo
Enjuagar el arroz bajo agua fría hasta que el líquido salga transparente ayuda a eliminar parte del almidón, lo que puede reducir el índice glucémico y prevenir picos de azúcar en la sangre, algo importante para personas con resistencia a la insulina o diabetes.
Usa menos aceite y sal
En recetas tradicionales se suele abusar del aceite o la mantequilla. Para un arroz más saludable, opta por una cantidad mínima de aceite de oliva o usa spray antiadherente. También conviene moderar la sal para evitar la retención de líquidos y cuidar la presión arterial.
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