¿Qué son los octógonos de las etiquetas y por qué son importantes?
La publicidad frontal en forma de octógonos nos alerta sobre productos que no son saludables. Tómalos muy en serio.
Los alimentos no son buenos por sí solos. Si de verdad queremos tener una vida saludable, tenemos que integrar la alimentación a un estilo de vida sano. Esto significa hacer ejercicio de forma regular, y evitar productos y costumbres dañinas, como tomar bebidas gaseosas o alcohólicas, por ejemplo, comer mal o demasiado, o trabajar mucho y dormir poco.
Así como es importante entender la salud como un todo integral, también lo es tener información correcta y veraz sobre nutrición. Durante décadas hemos vivido creando y creyendo mitos respecto de lo que nos hace bien o hace mal, al punto que hoy en día abunda información falsa que promueve prácticas alimenticias muchas veces nefastas. En especial en el contexto actual, con un virus que ha cambiado por completo nuestra forma de vida. Por eso es clave contar con fuentes fidedignas de información, y aprender a discernir lo que encontramos en Internet.
En nuestro país, el ente encargado de velar por la salud de las personas es el Ministerio de Salud (Minsa), pero también interviene Indecopi —en defensa del consumidor— y el Ministerio de Educación (Minedu), en lo que respecta a la alimentación en las escuelas. La salud pública es, pues, un tema que también debe abordarse desde una perspectiva integral.
Una alimentación saludable incluye variedad de productos, pero sobre todo, vegetales y frutas de distintos colores, así como grasas saludables.La ley de alimentación saludable
Luego de seis años de espera —mayo, 2013—, y a pesar de la oposición en distintos sectores de la industria alimentaria, en junio del 2019 se promulgó el Reglamento de la Ley de Alimentación Saludable (Ley N. 30021), que ha marcado un hito la historia de la nutrición y salud pública en nuestro país. ¿Y por qué es tan importante este Reglamento? Porque es la norma que estableció la obligatoriedad del uso de los octógonos en las etiquetas de los productos procesados y ultraprocesados, sólidos y líquidos. Entre ellos se incluyen las golosinas, los lácteos, las gaseosas y los embutidos, por ejemplo.
Gracias a estos octógonos, que deben colocarse en la parte frontal del etiquetado, podemos saber qué alimentos tienen alto contenido de sodio (sal), azúcar y grasas saturadas, para consumirlos con moderación. En especial si tenemos alguna condición, como es el caso de los diabéticos o los hipertensos, en cuyo caso, deben marginar las bebidas gaseosas y productos altos en sodio, respectivamente. Asimismo, basta que un producto contenga grasas trans para que lleve el octógono que indica su presencia y que recomienda no consumirlo.
Estas son las cuatro etiquetas. En el caso de las grasas trans se indica que su consumo se debe evitar, a secas, no reducir.Gracias a esta Ley, además, estos productos están prohibidos en los colegios de todo el Perú, y se espera que en un par de años las grasas trans se eliminen por completo de la industria de alimentos a nivel nacional.
Los octógonos son guías que nos permiten decidir sobre qué comemos y qué dejamos de comer. Y en un mundo en el que abundan las malas prácticas alimenticias –muchas veces promovidas por la industria de alimentos–, la presencia de esta figura en un empaque es una verdad rotunda que nos da esperanzas respecto de la nutrición en la salud pública.
Las golosinas son productos ultra procesados que se deben consumir con moderación, y no incorporarlas a nuestra dieta diaria.Si quieres saber más sobre la política de nutrición, te recomendamos que revises las Guías Alimentarias para la Población Peruana, una publicación del Minsa que incluye los lineamientos básicos de la Ley de alimentación saludable. Además, contiene una colección de recetas ricas y saludables, hechas con productos naturales de distinto tipo y origen. Para que siempre tengas opciones de comida sana a la mano.
¿Qué alimentos no están obligados a llevarlos?
Seguro nunca has visto estos octógonos en el cuarto de pollo con papas –y todas sus cremas– que pides por delivery; tampoco en los sánguches “de la esquina” o en un menú de barrio; ni los verás en los postres o refrescos que compras en la calle. Estos productos están exentos de llevar octógonos debido a que no pasan por los respectivos análisis físico químico y bromatológico requeridos para el Registro Sanitario, ya que son alimentos frescos.
La norma señala que esta alerta publicitaria no aplica para "los alimentos y bebidas no alcohólicas en estado natural no sometidos a procesos de industrialización; los alimentos de procesamiento primario o mínimo; los alimentos de preparación culinaria y los alimentos de regímenes especiales sujetos al Codex Alimentarius". Depende de ti evaluar si aquello que compras en la calle o al menudeo es bueno para ti o no.
Los productos procesados que no llevan octógonos son aquellos que están por debajo de límites permitidos de sodio, azúcar y grasas saturadas. De hecho, algunos productos "juegan" con esos parámetros para estar por debajo de los límites. Si quieres conocer cuáles son esos parámetros, puedes revisar este documento del Minsa.
Si quieres saber más sobre alimentación saludable, puedes revisar estas otras notas:
- Las grasas trans: ¿por qué debemos eliminarlas de nuestra dieta?
- Grasas saturadas: ¿por qué debemos consumirlas moderadamente?
- Las grasas buenas: ¿qué alimentos las tienen?