El secreto para hacer un huevo frito perfecto

7 pasos para freír el huevo de manera uniforme

Hacer un huevo frito no es lo mismo que hacerlo perfecto. Un huevo frito perfecto es aquel en el que la clara está completamente cocida, la yema está en su punto líquido y tiene una capa dorada alrededor. No se necesita de técnicas especiales ni utensilios específicos para lograrlo. A continuación, se detallará paso a paso cómo hacer un huevo frito perfecto.

1. De preferencia, usa una sartén pequeña con tapa (si es posible transparente, de forma que puedas ver cómo avanza la cocción al interior). Ten en cuenta que el tapar puede hacer que la yema adquiera un tono más claro, como con un velo blanco sobre ella.
2. Mantén el fuego siempre al mínimo.
3. Esparce una cucharada de aceite y, una vez que esté caliente, añade una pizca de mantequilla o margarina.
4. Quiebra la cáscara del huevo con un golpe y ábrela cerca a la sartén para que el huevo caiga suavemente.
5. Si lo prefieres, echa la sal solo en la clara para que no se formen puntos blancos en la yema y tapa la sartén. El vapor ayudará a lograr una cocción pareja y evitar que el huevo se queme.
6. Una vez que la clara se haya tornado color blanco, mueve ligeramente la sartén o usa una espátula para asegurarte de que el huevo no se pegue al fondo. Hazlo con cuidado para evitar que se rompa la yema, a menos que sea eso lo que buscas.
7. Retira el huevo con una espátula plana y colócale una pizca de sal sobre la yema y, si te gusta, un toque de pimienta.

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