¿Es seguro comer pescado tras el derrame de petróleo?

El derrame de petróleo ocurrido el sábado 15 de enero ha sido el peor desastre ecológico de los últimos años en nuestro país. El principal problema, además de los efectos en el medio ambiente, es el impacto sobre los recursos costeros y marinos (pescados, mariscos, etc), de los cuales dependen no solo los restaurantes y comensales, sino también los pescadores.

La contaminación por petróleo impacta directamente en la calidad de toda la fauna marina. En ese sentido, surgen naturalmente algunas interrogantes respecto de la inocuidad de los productos de mar: ¿es seguro consumir pescados y mariscos en este contexto? ¿Qué medidas debemos tomar para asegurarnos de que los productos no estén contaminados?

¿Quién tiene la palabra?

Hay varias instituciones, públicas y privadas, involucradas en este caso. Sin embargo, la entidad encargada de garantizar la inocuidad de los recursos marinos es el Organismo Nacional de Sanidad Pesquera (Sanipes). Este organismo, adscrito al Ministerio de Producción, cumple su función a través de la vigilancia, el control, la habilitación y la certificación sanitaria. 

En ese sentido, Sanipes emitió ayer jueves un comunicado detallando sus labores en la zona afectada y dando una serie de recomendaciones para las personas. Según el comunicado, se han “redoblado sus acciones de fiscalización en la zona impactada por el derrame de petróleo a fin de asegurar que los productos que llegan a los desembarcaderos y que se comercialicen en terminales pesqueros y mercados de abasto tengan la condición de aptos para el consumo humano”.

¿De dónde viene el pescado?

El impacto en los recursos marinos de la zona es innegable y por el momento, inestimable. Se calcula que más de 1500 pescadores artesanales no podrán salir a pescar en la zona por mucho tiempo, y por lo tanto, proveer de productos marinos a los restaurantes, mercados y familias de la zona. 

Sin embargo, el Terminal Pesquero de Ventanilla (Callao), al igual que otros en Lima, siguen operando debido a que los productos que recibe no provienen del área afectada. De hecho, los precios se mantienen, e incluso han bajado debido a que hay cierto temor de la población, lo que ha provocado una baja en la demanda.

Recomendaciones de Sinapes

En este contexto, es clave una comunicación efectiva, para evitar que la situación —de pescadores, negocios de venta de productos, restaurantes y familias— se agrave. Por ello, hay que saber que antes que un producto marino llegue a los puntos de venta finales, las embarcaciones se registran y controlan sanitariamente en los desembarcaderos pesqueros, para confirmar que son aptos para consumo. Sanipes ha inspeccionado los puntos de desembarque cercanos a la zona de derrame (Callao y Ancón), realizado mediciones organolépticas y la toma de muestras de productos.

Igual, hay que tener cuidado

Aunque las labores de control se vienen realizando, Sanipes recomienda igual que tanto los pescadores como la población en general se mantengan alertas. En ese sentido, recomienda a las personas que vayan a comprar productos marinos, tener en cuenta las características de frescura de los productos: los pescados deben oler a mar, tener la piel firme, las agallas de color rojizo y ojos abultados. Los pescados y mariscos contaminados por petróleo tienen un olor intenso a combustible, y sus manchas son evidentes. 

Así que ya sabes, los productos marinos que se comercializan actualmente han pasado por la supervisión de Sinapes y no muestran signos de contaminación porque no provienen de la zona afectada. Sin embargo, no bajes la guarda y revisa, como siempre, que estén frescos. Y si quieres hacer alguna denuncia, puedes escribir a alertasanipes@sanipes.gob.pe.