Prejuicios y verdades sobre el vino en caja y el de botella
El mercado del vino es más tradicional que los avances que se dan en tecnología. ¿Puede una caja de cartón cambiarlo todo?
Quienes vivieron en los años ochenta seguro recuerdan la llegada al país de las cajas de vino de bajo costo. Se trataba de vinos baratos, más propios de la cocina que para el consumo directo, pero que por su precio se imponían sobre otras opciones, sin importar la resaca.
Sin embargo, la tecnología ha avanzado mucho en los últimos 30 años, al igual que el mercado, al punto que hoy en día hay grandes bodegas de vino en el extranjero que producen vinos en caja de muy buena calidad con grandes ventajas para su economía (y la de los consumidores) y para el medio ambiente. ¿Te animarías a incluirlos en tu lista de compras?
Los prejuicios
Para Soledad Marroquín, experta en vinos, no es que necesariamente el vino de caja sea peor que el de botella. "Se trata solo de un prejuicio porque los vinos en caja que nos suelen llegar al Perú son muy sencillos; vinos jóvenes, simples, que sirven muy bien para cocina o coctelería, o para hacer una sangría; algunos, incluso, ni siquiera son vinos". Pero, evidentemente, ese vino que causaba estragos en los jóvenes bebedores de los ochenta ha cambiado y hoy las bodegas pueden producir vinos simples, pero bien hechos.
Hay que abrir nuevos caminos para que se den cambios en los hábitos del consumidor de vinos. La botella aún tiene una posición de privilegio, pero eso podría cambiar.Alina Santos, especialista en marketing de vinos, señala en la misma línea que “en el Perú aún no hay un mercado para los vinos en caja que —por otro lado— sí tienen un mercado fuera. Básicamente se trata de la mala imagen heredada, porque están asociados a los vinos de baja calidad que empezaron a inundar el mercado hace años". La especialista, que trabaja con productores de vino de otros países, nos cuenta que, en países con mayor cultura enológica, como Argentina o Australia, "estas cajas cada vez son más comunes porque ofrecen múltiples beneficios para el consumidor y el productor".
En otros países la oferta de vinos de caja es amplia; hay variedad de cepas y orígenes, y por supuesto, de calidad.Hay que pensar que la tecnología de la industria del vino se ha desarrollado mucho en las últimas décadas, y los vinos de hoy son mejores que los de ayer, especialmente los de caja... Incluso esas mismas marcas que se vendían hace 30 años, definitivamente tienen un mejor vino en caja hoy en día. En este sentido, el marketing y packaging tienen una tarea pendiente para la transformación de los hábitos de consumidor peruano.
Diego Cruz Gates, sommelier y gran conocedor del mercado de vino local, apunta que “en el mercado del vino hay mucho prejuicio respecto de aquello que se percibe como 'poco fino'. Pero a partir de la aparición de las tapas roscas hubo un cambio, que se ha dado más pronto en unos lados que en otros, y que ha servido para ver al vino como algo más cotidiano. Porque no todos los días podemos abrir una botella de 30, 40, 50 o 60 soles”.
Ventajas de la caja
Siguiendo con la sommelier Soledad Marroquín, “si bien la botella siempre va a tener más presencia, porque el vidrio es un material noble, la tecnología nos permite ahora tener otros envases de que permiten que el vino conserve su calidad, no se oxide, y por tanto, dure más... y además pueden contener hasta 15 litros".
Nadie puede negar que el envase Tetra Pak es uno de los grandes inventos de la industria de alimentos, así como su hermano más joven, el llamado Bag in Box, que es el mismo sistema que se usa en las cajas de agua, y que permite que, a través de una válvula —caño—, el líquido salga, pero no ingrese aire. De esta forma el vino no se oxida y dura mucho más que los de botella.
Pero, ¿qué otras ventajas tienen estas nuevas cajas, que combinan tecnología y practicidad? En sencillo:
- Son más ligeras.
- Protegen el contenido contra los rayos del sol.
- Son más fáciles de transportar que las botellas de vidrio, y son más resistentes.
- Su costo es más bajo que el vidrio.
- Son reciclables y tienen un impacto mucho menor en el medio ambiente
Se trata pues de un sistema de empaque muy práctico, económico y amigable con el medio ambiente.
Y esa es la idea. Tener a la mano un vino fresco, bien hecho, que dura mucho más que uno de botella y tiene un costo menor. Pero eso implica un cambio en un mercado local que aún parece ser un poco tradicional y snob. ¿Cuál es mejor que el otro? Pues es claro que cada uno tiene sus ventajas, y en especial, un mercado al cual satisfacer.
El dispensador permite solo que salga el contenido y que no entre oxígeno. Así el vino dura mucho más, pues no se oxida.Si te interesó esta nota, échale un vistazo a estas otras: