Ni frito, ni hervido: cómo cocinar el camote para conservar sus nutrientes
Descubre cómo cocinar el camote para aprovechar al máximo sus beneficios para la salud.
Evelyn Camarena
El camote es un tubérculo rico en vitamina A, B6, fibra y minerales como el potasio, fósforo y magnesio. Además, es versátil porque se puede incluir en diversas preparaciones como guisos, ensaladas, sopas, tortillas, purés y más. Sin embargo, muchos desconocen la forma correcta de cocerlo para preservar cada uno de sus nutrientes y cometen el error de freírlo o hervirlo. En esta nota, te revelamos cuál es el mejor método.
Cómo cocinar el camote para conservar sus nutrientes
El camote se suele hervir para acompañar diversos platos pero también se fríe en rodajas para disfrutarlos como snack. Lo que algunos desconocen es que cuando se aplican algunos de estos métodos en la cocina, las vitaminas desaparecen en el jugo de cocción. También, cuando son sumergidos en aceite caliente pierden sus antioxidantes y alteran su textura.
Por ello, la mejor forma de cocerlos es usando un horno o freidora de aire. Ambos ayudarán a conservar sus vitaminas, minerales y sabor característico. A diferencia de hervirlo, el horneado realza sus azúcares naturales sin agregar ingredientes extra, y evita la absorción de grasas.
Cómo preparar camote al horno
1. El primer paso es lavar muy bien el camote, puedes usar un cepillo para remover la tierra.
2. Seca y córtalo a la mitad en rodajas o bastones como prefieras. No es necesario pelarlas.
3. Precalentar el horno a 200 °C.
4. Vierte las porciones de camote en una bandeja con papel manteca o directamente sobre la rejilla.
5. Puedes rociar un poco de aceite de oliva, sal, orégano, romero o el topping que desees.
6. Deja cocinar entre 35 y 45 minutos, todo dependerá del tipo de corte del camote.
7. Retirarlas del horno cuando estén doradas por fuera y suaves por dentro.
8. Sirve y disfruta.
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