Halloween: DIGESA alerta sobre dulces adulterados que podrían poner en riesgo la salud de los niños
Especialistas recomiendan a los padres de familia evitar comprar golosinas sin registro sanitario.
Evelyn Camarena
Halloween es, sin duda, una de las fechas más esperadas por los niños y adolescentes. Esa noche, las calles se llenan de disfraces, risas y bolsas repletas de dulces. Pero entre tanta emoción, hay un detalle que muchos pasan por alto: no todos los productos que se ofrecen son seguros.
La Dirección General de Salud Ambiental e Inocuidad Alimentaria (DIGESA), del Ministerio de Salud, lanzó una advertencia clave para esta temporada: algunas golosinas que se venden sin registro ni procedencia comprobada podrían poner en riesgo la salud de los niños. El especialista de Digesa, Andrés Velásquez, explicó que consumir dulces sin rotulado o sin registro sanitario puede generar graves consecuencias para la salud, por lo que recomendó a los padres estar muy atentos al momento de comprarlas.
DIGESA advierte sobre golosinas adulteradas
“Estos productos que no tienen rotulado, no deben ser adquiridos por las personas que van a consumir caramelos o cualquier otro alimento industrializado. ¿Por qué? Porque estos alimentos, para empezar, no tienen una razón social quien lo fabrica, no hay un código de registro sanitario, no hay una fecha de vencimiento, no hay lista de ingredientes”, sostuvo Velásquez.
Recomiendan a los padres adquirirlos únicamente en tiendas formales o supermercados, donde se garantice un correcto manejo, almacenamiento y conservación de los alimentos. Comprar en lugares informales puede parecer una opción rápida, pero podría traer serios riesgos para la salud de los más pequeños.
Dificultades para sancionar a los responsables
“De causarle un daño a la persona, no solo le afecta la salud, propiamente, sino imposibilita a la autoridad de poder hacer la vigilancia y poder establecer responsabilidades", explicó Velásquez. Cuando un producto no tiene información clara en su etiqueta, como el nombre de la empresa, su dirección o los datos del fabricante, las autoridades no pueden rastrear su origen ni sancionar a los responsables. Los dulces en mal estado o elaborados sin normas de higiene pueden causar intoxicaciones, reacciones alérgicas, malestares estomacales, diarrea o vómitos.
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