Gripe aviar: ¿Se podrá comer pavo esta Navidad?

El pavo es el protagonista indiscutible de la cena navideña; sin embargo, desde que surgieron los primeros brotes de gripe aviar detectados en aves silvestres de las regiones de Piura, Lambayeque, Lima y otras zonas de la costa peruana, se han desatado una serie de temores respecto a su consumo en estas fiestas. Pero, ¿cuáles son realmente los riesgos?

En primer lugar, hay que tener en cuenta que la declaratoria de alerta sanitaria de 180 días anunciada por el Servicio Nacional de Sanidad Agraria (Senasa) se estableció con fines preventivos. Su propósito era alertar a las autoridades y a la población de la presencia de la influenza aviar tipo A subtipo H5, para tomar las medidas necesarias e impedir que esta enfermedad altamente contagiosa se multiplique en aves de traspatio y de granjas comerciales.

Lamentablemente, en los últimos días, de acuerdo a lo reportado por el Senasa, se han presentado los primeros brotes del virus en aves de corral. Primero, en el centro poblado Gallito, del distrito de San José, en la región Lambayeque. Y, recientemente, en una granja de gallinas ponedoras en el distrito de Huacho, provincia de Huaura, en la región Lima.

Ante esta situación, el Senasa ha declarado, mediante Resolución Jefatural Nº 0180-2022-MIDAGRI-SENASA, el estado de emergencia sanitaria (en todo el territorio nacional) por un periodo de 90 días. Con dicha medida, se busca intensificar las tareas de vigilancia, restringir la movilización de aves domésticas sin certificado sanitario y prohibir el desarrollo de ferias o eventos gallísticos en todo el país. Si bien estos brotes se encuentran bajo control según lo informado por la autoridad sanitaria, genera preocupación pues en esta época del año se eleva el consumo de aves de corral, como el pavo, en el país.

¿Cómo se propaga la gripe aviar?

La gripe aviar se clasifica en dos tipos: la de baja y la de alta patogenicidad. Dicho de otra manera: por su baja o alta capacidad para infectar el organismo de las aves. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), el virus de baja patogenicidad es aquel que causa una enfermedad leve, sin presencia de síntomas e incluso puede pasar desapercibido. Por su parte, el virus altamente patógeno, llamado de tipo A y asociado a los subtipos H5 y H7 se caracteriza porque puede propagarse rápidamente y, de forma simultánea, producir altas tasas de mortalidad en diferentes especies de aves.

Si bien la mayoría de estos virus no son zoonóticos, lo cual significa que no se transmiten de animales a seres humanos, la variante A(H5N1) detectada en el Perú sí es altamente patógena y tiene la capacidad de infectar al organismo humano. En ese caso, el principal factor de riesgo es el contacto directo o indirecto con aves infectadas, pues se propaga a través de la saliva, la mucosidad y las heces de aves infectadas.

Los síntomas de este virus en humanos, son muy parecidos a una gripe e incluyen tos, fiebre, dolores musculares e irritación de garganta. También infecciones oculares, neumonía u otros malestares respiratorios.

Contagio

Debido a que la actual alerta sanitaria se ha desencadenado por la presencia del virus A(H5N1), los seres humanos estamos expuestos a esta enfermedad; por lo tanto, debemos evitar cualquier tipo de contacto con aves silvestres que se encuentren varadas, heridas o deambulando. De igual forma, con aquellas superficies que podrían haber entrado en contacto con la saliva, la mucosidad o las heces de aves infectadas.

El médico veterinario Pancho Cavero señala al respecto que "se deben tomar las medidas sanitarias estrictas y restringir cualquier tipo de contacto con aves silvestres. De esto debemos sacar una enseñanza: un animal silvestre no es una mascota y, en general, debemos evitar tocarlos porque siempre son un riesgo latente".

¿Pero qué hay de las aves de corral?

¿Una Navidad sin pavo?

Sabemos que una buena cocción a más de 70 ºC garantiza la eliminación de agentes infecciosos en la comida (como lo indica la Organización Mundial de la Salud). Sin embargo, el principal riesgo para los humanos ante este brote podría estar en la manipulación de un ave afectada al momento del beneficio o incluso en la manipulación en casa. Pero ese riesgo surgiría si se detectase que hay un contagio masivo en los corrales y esa no es la situación actualmente. De hecho, el Senasa ha señalado que los actuales brotes no representan un riesgo para el consumo de carne o huevos de aves domésticas por lo que no existen razones suficientes para prescindir del pavo (o cualquier otra ave de corral) ni en los días que vienen y probablemente tampoco en Navidad.

En todo caso, es recomendable siempre adquirir nuestros alimentos en lugares que garanticen un tratamiento responsable de la mercadería. Y será necesario estar alertas en las próximas semanas por si las autoridades detectan que el virus se ha propagado de forma riesgosa en los criaderos y si esto se convierte en un factor de riesgo para la población.