Adolescentes venezolanas crearon un negocio de comida y hoy genera miles de dólares
Las niñas de tan solo 12 años decidieron iniciar un proyecto en sus vacaciones y en poco tiempo tuvieron un gran éxito en el rubro gastronómico.


Las venezolanas Alana y Arantza Urbina Ruiz, de 12 años, en vez de jugar como toda niña a su edad, tuvieron la idea de crear un emprendimiento de carritos gastronómicos en Miami, Estados Unidos. Eso sí, con la promesa a sus padres de que no descuidaran sus estudios, y así fue. Luego de destacar en el cuadro de honor en la escuela, rápidamente tuvieron el permiso de llevar a cabo su proyecto, sin saber que en pocos meses tendría un gran crecimiento que necesitaría ayuda, sumándose a su madre, quien ahora trabaja junto a sus hijas.
Las hermanas venezolanas y su idea de negocio
En 2023, las mellizas Alana y Arantza soñaron con tener su carrito de comida en el que ofrecieran diversos platos. Todo ello ocurrió cuando se encontraban de vacaciones y le contaron a sus padres sobre su idea, quienes les pusieron la condición de que debían estar en el Cuadro de Honor de la escuela, explicaron en una entrevista al Programa Primer Impacto, de Univision.

“Debo confesar que yo pensé que eso no iba a suceder”, narró Mandy Ruiz Pisani, madre de las niñas. “En diciembre, cuando me llega la carta que las dos quedaron en el Cuadro de honor, yo dije: ‘Uy, ok, ahora sí me toca comprar el carrito’”, mencionó entre risas. y junto a su esposo decidieron apoyar el sueño de las niñas, comprándoles su primer carrito. “Mi esposo me decía: ‘¿Qué es lo peor que puede pasar? Que quede como un tender de ropa ahí en la casa’”, explicó la mujer. Lo que nunca pasó, ya que el negocio “Le chic food cart”, fue todo un éxito con sus seis carritos: uno de arepas, otro de hot dog, de choripanes, comida cetogénica y otros dos con diferentes platos, que ofrecen sus servicios para eventos.
El crecimiento de “Le chic food cart”
El negocio creció mucho en poco tiempo y con ello, la demanda de eventos y servicios fue mayor. La madre tomó la decisión de dejar su trabajo para apoyar a sus niñas. “Hoy en día trabajo 100% para mis hijas”. “Cuando hay un evento en la mañana, tengo que ir yo. Las dejo en el colegio, me voy al evento, monto todo, les paso la foto, ellas aprueban, mueve esto, quita esto y después las busco y así sucesivamente”, relató.

La organización del negocio se divide según la habilidad de cada melliza. “Mi fuerte son los números. Como hay cosas que aún no entiendo, y mi papá también es muy bueno con números, él me ayuda”, contó una de ellas. La otra dijo que se concentra en el área creativa: “Yo me encargo del marketing y mi mamá me ayuda con los videos”. El dinero que ganan las hermanas Urbina Ruiz decidieron invertirlo para la universidad y también en cursos de marketing digital y mentalidad empresarial. Más adelante quieren ayudar a otros inmigrantes a emprender. “Nos vamos a concentrar en ayudarlos para que ellos puedan hacer lo que les gusta y para que puedan tener las herramientas para empezar su negocio”.
Te puede interesar: